sábado, 13 de noviembre de 2010

Mayo 2010



   A principios de Mayo fuimos a un sitio que se llama Chichón a celebrar el día de mamá. Es un sitio muy bonito y había una plaza redonda con burros que paseaban a nenes mayores. Hasta entonces papá era el único burro que yo conocía. Afortunadamente, se le diferencia bien de los de Chinchón porque tiene las orejas más pequeñas.

Luego volvimos a Oviedo, a pasar unos días con la güelita, la bisa y el Titorrob. Además, conocí a los padris de papá y me explicaron que pronto el Titorrob se convertiría en mi padri y la mamá de Caminito en mi madri.

El Titorrob colaboró en las labores domésticas dándome de comer. Debe de tener poca experiencia con nenas porque se le veía torpe con la cuchara. La güelita sí que tenía buena mano, me arrorraba muy bien para dormirme. Eso sí, no sé si algún día la perdonaré que me bañara en un barreño de la ropa.


Ya de vuelta en Casa, un día nos vestimos todos muy guapos y fuimos a Getafe, donde toda la gente va muy elegante. Yo no me enteré muy bien de lo que pasó. Sólo sé que un señor de traje le dio la mano a mucha gente, entre ellos a papá.

Casi se me olvida, ¡un día fui al Carrefour!

domingo, 7 de noviembre de 2010

Abril 2010

   El mes de Abril comenzó con una gran sorpresa, la güelita Mercedes vino a Casa a visitarme. Desde primeros de año no la veía, así que me alegró mucho tenerla conmigo. Hice muchas cosas con ella, dimos paseos, jugamos, leímos un libro que flotaba en la bañera... pero lo mejor de todo fue que a la vez vino Caminito a verme y pudimos jugar todos a la vez.

Mis papás decidieron que ya podía comer algo distinto al bibi, así que un día me dieron a probar fruta triturada. La verdad es que no me gustó mucho, pero ahí seguían ellos pelando y triturando fruta todos los días a la hora de la merienda. Como yo no me comía nada, luego papá se cenaba mi fruta con el yogurt.

Un domingo fui con mis papás al parque del lago y allí estaban también la güeli Palmi, Caminito y sus papás.


Una tarde a final de mes papá me llevó a Leganés para presumir de nena delante de sus compañeros. También me llevó a conocer a Lucía que acababa de salir de la guarder y estaba merendando con su mamá. Me djio que la guarde era un sitio muy divertido con muchos nenes y que ojalá tuviera suerte y mis papás me llevaran allí pronto.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Marzo 2010

   A principios de Marzo vino Titorrob a pasar unos días en Casa conmigo. Pero lo más mejor de todo el mes fue que mi prima Caminito me invitó a su fiesta de cumpleaños

Había otro nene que también era primo de Caminito y se llamaba Adrián. Ellos jugaban a cosas de nenes mayores,se robaban los gusanitos y hacían torres. Como a mí no me dejaban comer gusanitos, Caminito decidió enseñarme a hacer torres. Desplegó toda su paciencia y, tengo que reconoce que tiene unas innegables aptitudes pedagógias, pero yo soy más del sector de la demolición que del de la construcción.



viernes, 5 de noviembre de 2010

Febrero 2010

   Febrero fue un mes la mar de tranquilo. Yo me pasaba el día en Casa con mamá que seguía de baja. La güeli Palmi venía mucho a visitarme y algún fin de semana nos invitó a comer a todos... Bueno, en realidad invitó a comer a Caminito, a sus papás y a mis papás, es decir, a todos menos a mí. A mí quien me daba de comer era mamá y lo hacía de buena gana, se podría decir que de buena leche.

Unos amigos de mis papás me presentaron a un nene rubio muy guapo que se llamaba Mario. Hicimos buenas migas, pero desgraciadamente él estaba más interesado en meter los dedos en las bisagras de las puertas que en jugar conmigo.


Un día mis papás se dieron cuenta de que no habían estrenado toda la ropa de niña repollo tejida a mano que me habían regalado. Así que tuvieron la mala idea de hacer una sesión de fotos repolludas. Yo dejé bien patente mi malestar al respecto. Afortunadamente, entre toda esa ropa cursi había una chaquetica y un gorrico blancos que me había hecho la güelita Mercedes que sí me gustaron.

Enero 2010

    En enero sí que me llevé un sorpresón, fuimos a Oviedo y allí... ¡conocí a la bisa! Se llama María, como yo, y desde que nos conocimos nos caímos muy bien. Ella me hacía cuchimonas y yo me las dejaba hacer. Vive con la güelita Mercedes y el Titorrob. Es mucho más calmosa que la güelita, pero no tanto como el Tito. 

La bisa se lo monta bastante bien, porque para andar utiliza un andador muy chulo y, cuando sale a la calle, le llevan en una sillita que aunque no es tan bonita como la mía,  parece bastante cómoda. Yo, según la vi, le eché el ojo a su andador. Igual para vosotros no es gran cosa, pero para mí, que no sabía caminar, me pareció un invento genial.
También me lo pasé muy bien con el Titorrob, con quien mantuve largas conversaciones vocálicas y con la güelita que me tumbaba boca abajo para que levantara mi cuellecito.

Un día fuimos a un centro comercial a conocer a un nene que era hijo de unos amigos de mis papás. El nene se llamaba Leo, pero no me dio ningún juego, estuvo durmiendo todo el rato que pasamos con ellos.

Después de unos días en Oviedo, mis papás decidieron que se habían acabado las vacaciones y había que regresar a Casa. A los pocos días del regreso, me cogí mi primer catarro. No fue gran cosa, pero lo pasé mal, porque tenía muchos moquines y me ahogaba un poquito.

Ya de vuelta a la rutina, cada siete días iba a visitar a Caminito o se venía ella a Casa con sus papás. Me lo pasaba muy bien con mi primita. El problema es que, luego de pasar la tarde con ella, al dormirme soñaba que seguíamos jugando juntas y, como al despertarme a medianoche Caminito no estaba allí, yo entraba en tal estado de agitación que mamá decía que me ponía psicótica. Como mamá se preocupaba mucho y papá no sabía qué hacer, me dormía en mi sitio favorito ... sentada a horcajadas en el cuello de papá.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Diciembre 2009

  El mes de Diciembre comenzó muy bien. Yo ya me había hecho a vivir en Casa con mis papás y además tenía muchos amigos. Me encantaba pasar las horas jugando y echándome unas risas con ellos.

Un día me compraron un pijamita rojo y yo empecé a temerme lo peor. Seguro que me harían alguna foto humillante para enviar a familia y amigos. Como ya está muy vista, no le he dejado a papá ponerla en este blog.

A final de mes mis papás se cogieron vacaciones y un día me subieron en el coche y no paramos hasta llegar a León. Para entonces yo tenía mucha hambre, así que, nada más subir a casa de la güeli Palmi, le vacié los pechos a mamá por primera vez en mi vida. A mi pobre mamá se le caían las lágrimas de la alegría. La ilusa de ella creía que de ahí en adelante comenzaría a mamar bien, pero se equivocó.

En León me lo pasé muy bien. Para que estuviera tan a gusto como en Casa, papá me llevó mi cunita y la montó allí. En ella yo pasaba los días con Paco y las noches con Felipe. Además de ellos dos y mis papás, estaban siempre comingo la güeli Palmi, Caminito y sus papás.





En cuanto a la comedera, yo seguía a mi ritmo. Comía cada tres horas y tardaba una hora cada vez. 
Como me pasaba el día enchufada a la teta de mamá, cada vez que me veía, mi prima Caminito decía "bebé Maía am".

En León salí poco, apenas vi la calle. Lo bueno es que sí conocí a mucha gente allí, amigos de mamá y de papá.